“RTC y sus clasificaciones”, el podcast
de Blue Demon jr.
“Hola, soy Blue Demon Jr y hoy tengo muy claro de lo que voy a hablar: de RTC y sus dichosas clasificaciones. Todos o casi todos vemos la televisión en algún momento de nuestras vidas, la famosa caja idota, ¿Alguien debe de elegir por nosotros lo que vemos? ¿Es una decisión personal?".
Así es como Blue Demon Jr comienza su podcast, mezclando efectos de sonido, música, la voz de un hombre o mujer, y un tema que sea atractivo, lo suficiente para que llame la atención.
El podcasting es un nuevo elemento que nos ofrece la Internet para grabar con voz una especie de “comentario” u opinión personal. “Consiste en crear archivos de sonido (generalmente en ogg o mp3) y distribuirlos mediante un archivo RSS de manera que permita suscribirse y usar un programa que lo descargue para que el usuario lo escuche en el momento que quiera, generalmente en un reproductor portátil.”*
Como el de el heredero a la máscara azul hay muchos, sería difícil intentar hacer un cálculo de cuantos existen por Internet, porque son como los blogs que hay millones por cada país.
Un podcast es precisamente algo semejante a un blog, o una columna en un periódico, en el sentido de opinar y dar datos sobre un tema en específico, es una columna con sonido. En otras palabras un podcast es muy similar a un programa de radio, pero diferido, las personas lo graban y a veces sin editar lo presentan, le agregan efectos de sonido y queda disponible para que la gente lo baje y lo escuche cuando pueda.
La palabra podcast surge como el acrónimo de las palabras pod y broadcast, fue sugerido para describir la posibilidad de escuchar radio en aparatos portátiles. Los contenidos pueden ser variados, por lo general es una persona hablando sobre varios temas, o esa es la definición más utilizada. Como en los weblogs, hay podcast muy sencillos en donde sólo se escucha la voz del “locutor”, pero hay algunos más sofisticados que asemejan un programa de radio y se intercala la voz, un poco de música y por qué no hasta efectos especiales.
Pero, ¿Cómo le hago para escuchar un podcast?, en realidad no es nada complicado, pues la opciones son muchas. Se pueden escuchar en el ordenador o descargarse y escucharlos en un reproductor de música incluso, se pueden grabar en discos y escucharse en formato mp3. En realidad la opción es personal, pero muy accesible.
“Honestamente pregunto, ¿Alguien sabe quienes son y con que criterios fueron elegidos los supervisores que harán que esto funciones al pie de la letra?”, es la interrogante que se hace Blue Demon jr al hablar sobre las clasificaciones televisivas dispuestas recientemente. Es un ejemplo de podcast en donde el emisor habla sobre un tema de interés general, se expone en una página de Internet y los visitantes la descargan o la escuchan desde la página, dejan un comentario o hasta envían copias por email.
En realidad escuchar y bajar de Internet estas grabaciones es muy sencillo, pero muchas personas tienen problemas para almacenarlos por el ancho de banda y esas complicaciones que sólo la tecnología tiene.
Aunque los podcast se han vuelto muy populares, todavía no superan, ni igualan, al número de weblogs que hay en la red pues se estima que a finales del 2004 había alrededor de 10 millones de bitácoras online. En cambio podcast son aproximadamente 4600 en inglés y unos 540 en español; aunque seguramente debe muchos más perdidos en el cybermundo sin “censarse”.
Después de leer la historia, el qué y cómo de un podcast la invitación es unirse haciendo uno, o bien visitando una página en Internet y descargar, eso hice yo y debo confesar que es algo muy entretenido, es muy similar a escuchar un pequeño programa de radio, con la diferencia de que lo escuchas en tu computador, lo puedes pausar y volver a reproducir, es decir es totalmente manipulable su reproducción.
La verdad, siempre he creído que no se debe hablar de lo que no se sabe, pero para escribir este ensayo investigué y aunque no soy una experta en esto del podcasting citaré a Blue Demon jr. al final de su podcast: “(..) Para mis retractores que empezarán a preguntarme por qué ando hablando de estas cosas, la respuesta es muy simple porque puedo y porque quiero.”
Alexiita
